The Blue Trade II: Nuevos Aranceles para China
Del “mercado abierto” a la “reconfiguración regional” — y por qué EUA y Japón importan más que nunca
Norteamérica está elevando barreras (arancelarias y regulatorias) frente a China y eso empuja una fase más intensa de nearshoring/friend-shoring. México deja de ser solo “neutral” y pasa a ser un nodo industrial y logístico cuyo valor crece cuando los bloques comerciales se endurecen.
1) La hipótesis central: no es “cerrar” a China; es encarecerla y vigilarla
En diciembre de 2025, México aprobó aumentos arancelarios de hasta 50% para más de 1,400 bienes importados, con foco en China y otros países asiáticos sin tratado con México, con entrada en vigor en 2026. [1][2] La propia cobertura subraya que la medida también responde al contexto de la revisión del USMCA/TMEC en 2026 y a presiones para reducir el rol de México como plataforma indirecta de acceso chino a Norteamérica. [1][3]
En paralelo, la Oficina del Representante Comercial de EE. UU. (USTR) ha sido explícita en el mensaje: México y Canadá no deberían funcionar como “hubs de exportación” para China hacia el mercado estadounidense. [4]
1) Oportunidad directa: cooperativas como “proveedores de cumplimiento” para nearshoring alimentario
Esto empuja a las cadenas a buscar proveedores regionales con menos fricción. [1][2][3] En mariscos y peces esto se traduce en algo muy concreto: quien pueda demostrar origen, legalidad, trazabilidad y consistencia de lotes, gana preferencia.
Para una cooperativa, “nearshoring” significa:
contratos más estables (menos volatilidad de rutas largas),
mejor poder de negociación si el comprador necesita continuidad,
y posibilidad de subir de “commodity” a “proveedor con estándar”.
2) Oportunidad con Japón: no “reemplazar” a nadie; abrir canal premium con reglas claras
El acuerdo (MOU) entre Seafood Legacy y COMEPESCA anunciado el 3 de diciembre de 2025 es relevante para cooperativas porque crea una plataforma de colaboración que suele ser requisito previo para compradores premium: estándares, métricas y verificación.
Cómo se capitaliza desde una cooperativa:
usar el MOU como respaldo para un programa regional de “sustainable & traceable seafood” (lotes trazables, bitácoras, controles),
construir portafolios por especie (abulón, pepino de mar, ostión/peces) con evidencia,
y salir a conversar con compradores japoneses/asiáticos en clave de continuidad y cumplimiento, no de coyuntura.
3) Oportunidad con Estados Unidos: seguir vendiendo más, pero con el estándar correcto
Estados Unidos sigue siendo el mercado más grande por valor de importación; FAO/GLOBEFISH reporta a EE. UU. como principal importador y un valor de importaciones de USD 26.6 mil millones en 2024. [8] Ese mercado, sin embargo, se está moviendo hacia requisitos más estrictos (procedimientos, certificaciones de admisibilidad y, en ciertas pesquerías, comparabilidad bajo MMPA). [9][10]
Para cooperativas mexicanas esto es ventaja si se hace bien: cuando sube el estándar, muchos competidores se caen por documentación o trazabilidad. México puede crecer como proveedor regional si entrega:
trazabilidad por lote,
cadena fría verificable,
y consistencia de calidad/volumen.
5) Plan de acción práctico para cooperativas (60–90 días)
Esto es lo mínimo para convertir la coyuntura en ventas:
“Paquete exportable cooperativo” (un formato único regional)
Ficha de especie/temporada/zonas
Bitácoras y lotificación
Evidencia de cadena fría
Documento de trazabilidad por lote
Contacto responsable y tiempos de respuesta
Portafolio de mercados, no un solo destino
EE. UU. como ancla de volumen y continuidad (cumplimiento) [8][9][10]
Japón como canal premium con marco de sostenibilidad (MOU) [6][7]
Asia complementaria donde haga sentido, sin dependencia única
Mensaje comercial anti-oportunismo (guion corto)
“No venimos a ‘aprovechar’ conflictos; venimos a garantizar continuidad, cumplimiento y trazabilidad desde cooperativas organizadas.”
Pero aquí entra la voz objetiva, se viene muhco trabajo, papeleo y burocracia. Y si las cooperativas del Noroeste quieren que esta coyuntura sea un antes y un después, la estrategia es simple: convertir sostenibilidad en evidencia, neutralidad en confianza, y alianzas —con Estados Unidos como comprador ancla y con Japón como socio de estándares— en rutas comerciales confiables que sostengan la producción pesquera y acuícola de México.
Referencias
[1] Reuters (11-Dec-2025). Mexico's Senate approves tariff hikes on Chinese, other Asian imports.
[2] Associated Press (10-Dec-2025). Mexico's Congress approves tariff hikes on imports from China and others.
[3] Financial Times (11-Dec-2025). Mexico imposes tariffs of up to 50% on Chinese goods.
[4] Federal Reserve Bank of Dallas (31-Oct-2025). Higher tariffs in U.S., Mexico part of global response to China export surge.
[5] Reuters (04-Dec-2025). Canada and Mexico should not be export hubs for China, says USTR.
[6] Undercurrent News (03-Dec-2025). Japan’s Seafood Legacy, Mexico’s COMEPESCA partner to advance sustainable fisheries.
[7] Seafood Legacy (03-Dec-2025). Press Release: Seafood Legacy and COMEPESCA sign MOU…
[8] FAO/GLOBEFISH (17-Feb-2025). World fish trade fall in 2024 (EE. UU. import value USD 26.6B).
[9] NOAA Fisheries. Seafood import prohibitions under the Marine Mammal Protection Act.
[10] U.S. Federal Register (17-Dec-2024). Seafood Import Procedures and Certification of Admissibility.
Si me dices qué cooperativas (nombres o localidades) y qué especies exactas (abulón, pepino, ostión, pulpo, etc.), lo convierto en un one-pager de oferta comercial por cooperativa: SKUs, temporada, volúmenes realistas, dossier documental y guion de venta para EE. UU. y Japón.
NOTA: JAPON VS MEXICO?
También hay que anticipar un escenario de traslape competitivo entre Japón y México: tras el veto/restricciones chinas, Japón ha estado diversificando y empujando exportaciones de productos del mar hacia Estados Unidos, Europa y otros mercados de Asia para cubrir el hueco dejado por China.[1] En 2024, ese esfuerzo ya se reflejó en cifras: las exportaciones agro-forestales y pesqueras japonesas crecieron y Estados Unidos pasó a ser su principal destino, con un aumento reportado de 17.8% en 2024, mientras que el golpe en China se compensó con crecimiento en otros mercados (incluida Europa).[2]
Esto significa que, en la práctica, Japón puede “mover” volúmenes y marketing hacia los mismos canales donde México compite o quiere crecer: retail y foodservice en EE. UU., distribuidores premium, y compradores que pagan por consistencia. En especies concretas, el caso más visible es el de bivalvos (por ejemplo, vieira), y también productos de alto valor asociados al gusto asiático como pepino de mar, cuya caída de exportación en Japón se atribuyó directamente a las restricciones chinas.[2][3] En paralelo, México ya tiene presencia exportadora relevante en moluscos hacia EE. UU.; por ejemplo, los ostiones frescos/en concha de México tuvieron como principal destino a Estados Unidos (US$5.83M en 2024), con Baja California como estado líder.[4] Si Japón intensifica su reorientación exportadora hacia EE. UU. y otros destinos “sustitutos”, el riesgo de rivalidad México–Japón no es teórico: se puede traducir en presión por espacio en anaquel, precios y contratos.
La solución no es “evitar competir” (sería ingenuo), sino administrar la competencia para que no destruya valor. Aquí el puente institucional sirve: el MOU firmado por Seafood Legacy (Tokio) y COMEPESCA busca mejorar cooperación en pesca sostenible y responsable entre Asia Oriental y México, precisamente para construir marcos de colaboración más que choques de corto plazo.[5] Operativamente, esto se traduce en: (i) segmentación de portafolios (Japón como “heritage premium” en categorías específicas; México como “origen cooperativo + continuidad + trazabilidad” en otras), (ii) acuerdos de complementariedad por temporada y por formato (fresco premium vs valor agregado), (iii) adopción compartida de métricas/estándares verificables para que el comprador perciba un “corredor Pacífico responsable” en vez de una guerra de descuentos, y (iv) reglas claras para evitar canibalización en categorías sensibles (por ejemplo, pepino de mar), donde el riesgo reputacional por IUU hace que el mercado castigue al origen que no pueda demostrar control.[3][5]
En síntesis: sí, Japón puede convertirse en rival comercial en ciertos canales; pero la manera madura de resolverlo es competir donde toca y cooperar donde conviene, usando estándares y trazabilidad como el idioma común.
Referencias
[1] Reuters (20-Aug-2024). Japan looks to boost seafood exports to new markets after Chinese ban, trade body says. Reuters
[2] Reuters (04-Feb-2025). Japan's 2024 food exports hit record high despite China's seafood import bans. Reuters
[3] SeafoodSource (25-Feb-2025). Japan posts food export record in 2024, but China’s ban on seafood still dragging on industry (impacto en pepino de mar y vieiras). SeafoodSource
[4] DataMéxico (Secretaría de Economía). Oysters, even in shell, live/fresh/chilled — main destination United States US$5.83M (2024). Secretaría de Economía
[5] Undercurrent News (03-Dec-2025). Japan’s Seafood Legacy, Mexico’s COMEPESCA partner to advance sustainable fisheries (firma de MoU y objetivo de cooperación). Undercurrent News

